El aceite de oliva virgen extra, esencial para las personas mayores
Con una población cada vez más envejecida, el cuidado de la salud se ha convertido en un imprescindible entre las personas mayores. En términos alimenticios, la dieta mediterránea es la mejor medicina natural para sentirse bien por dentro y por fuera, siempre combinada con el ejercicio físico. Desde ALEVOO abordamos la alimentación y el estilo de vida saludable basado en la dieta mediterránea como modelo alimentario a seguir para prevenir factores de riesgo y disminuir la incidencia de enfermedades neurodegenerativas, cáncer, y enfermedades cardiovasculares asociadas a la edad, entre otras.
Una dieta equilibrada influye positivamente en la prolongación de una vida saludable. En ALEVOO, recomendamos la adherencia a la dieta mediterránea, caracterizada por la ingesta de frutas, verduras, legumbres, carnes, pescados y el aporte de grasas saludables monoinsaturadas presentes en nuestro aceite de oliva virgen extra ALEVOO. Un manjar que proporciona la dosis nutricional necesaria para prevenir el envejecimiento y deterioro del organismo (más acentuado en personas mayores).
La dieta mediterránea y la práctica de ejercicio físico de forma regular son los dos hábitos más importantes que debemos inculcar tanto a nuestros mayores como a los familiares y profesionales que les cuidan y están a su lado. Centrándonos en la alimentación, la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología defiende que la nutrición juega un papel importantísimo en la longevidad de las personas mayores mediante la protección y cuidado de las funciones de órganos y tejidos previniéndoles de patologías asociadas al envejecimiento.
Desde ALEVOO, recomendamos el consumo diario de nuestros aceites de oliva virgen extra, con los que, gracias a su composición y valores nutricionales excepcionales, contribuimos a mejorar los hábitos diarios de alimentación y salud de los consumidores.
AOVE, para el cerebro de las personas mayores
Estudios internacionales han demostrado la actividad neurológica antienvejecimiento del compuesto hidroxitirosol presente por naturaleza en el aceite de oliva virgen extra. A lo largo de la vida, la regeneración de las neuronas viene determinada por el proceso denominado neurogénesis, el cual tiene lugar en el hipocampo del cerebro y es el responsable de la memoria episódica. Con el paso de los años, las células madre a partir de las cuales se generan las neuronas, así como las propias neuronas, disminuyen considerablemente y es precisamente el hidroxitirosol del AOVE el que desempeña la protección de estas células gracias a su actividad antioxidante. La ingesta diaria de la dosis adecuada de aceite de oliva virgen extra (3 o 4 cucharadas diarias) aumenta la funcionalidad del hipocampo, estimulando la neurogénesis adulta.
Otro beneficio importante para el cerebro de la ingesta de AOVE es su acción sobre las lipofuscinas -residuos de oxidación de lípidos y proteínas que se pueden acumular en las células neuronales- puesto que produce la disminución de las mismas protegiendo la actividad de las neuronas y evitando enfermedades neurodegenetarivas.
Al detalle
Igualmente, debemos destacar la relación del envejecimiento con un grupo de enfermedades denominadas tauopatías que se caracterizan por la acumulación gradual y de forma anormal de la proteína tau en el cerebro, lo que da lugar a la disminución de la función mental o demencia. Se ha demostrado que el AOVE es efectivo frente al deterioro mental relacionado con la tauopatía denominada “demencia frontotemporal” -enfermedad que afecta principalmente a los lóbulos frontal y temporal del cerebro, áreas asociadas con la personalidad, la conducta y el lenguaje- y con la enfermedad de “alzhéimer” -una forma de demencia que afecta al hipocampo y, principalmente, al almacenamiento de memoria en el cerebro-. Se ha demostrado, también, que el tejido cerebral en el caso de alimentación con AOVE no desarrolla deterioro cognitivo, ni placas amiloides ni proteínas “pegajosas” que impidieran la comunicación entre las neuronas en el cerebro.
Las proteínas tau normales no se vuelven defectuosas ni se acumulan en el cerebro formando depósitos tau dañinos denominados “enredos”. Estos depósitos de tau (similares a las placas amiloides de la enfermedad de alzhéimer) son los responsables del bloqueo de la comunicación entre las neuronas y el consecuente deterioro del pensamiento y la memoria que provoca la demencia frontotemporal. En consecuencia, es importante destacar que ha sido demostrado que el AOVE previene el deterioro cognitivo, la perdida de memoria, y el envejecimiento cerebral protegiendo las proteínas tau y favoreciendo el buen estado del tejido cerebral. Además, tenemos que destacar que, con la ingesta de AOVE, la función cerebral mejora por el aumento de la síntesis de la proteína complexina-1, cuya actividad es esencial en el mantenimiento de sinapsis saludables.
AOVE, el gran apoyo del corazón
Seguir una alimentación equilibrada actúa como antioxidante y mejora el perfil lipídico de las personas mayores. El AOVE, pilar fundamental de la dieta mediterránea, es un súper alimento rico en antioxidantes protectores de las células cardiacas y bien conocido por sus múltiples beneficios para la salud cardiovascular.
Gracias a su composición rica en ácido oleico y polifenoles antioxidantes, el aceite de oliva virgen extra disminuye la hipertensión, reduce el colesterol total, aumenta el colesterol HDL (colesterol “bueno”) y disminuye el colesterol LDL (colesterol “malo”) previniendo a nuestros mayores de arterioesclerosis y otras enfermedades cardiovasculares.
AOVE, para el aparato digestivo de las personas mayores
Los beneficios del aceite de oliva virgen extra en el aparato digestivo son numerosos, tanto si se ingiere en crudo en ayunas como si se ingiere en el resto de las comidas a lo largo del día.
Los beneficios de tomar una cucharada de aceite de oliva virgen extra en ayunas se reflejan en el correcto funcionamiento del aparato digestivo, destacando:
- El AOVE disminuye la acidez gástrica formando una película protectora en el estómago la cual reduce el pH ácido y favorece el bienestar digestivo.
- El AOVE previene el estreñimiento estimulando el tránsito intestinal gracias a su actividad lubricante y moduladora de la microbiota del intestino.
La ingesta del AOVE en las distintas comidas del día, proporciona igualmente numerosos beneficios en la salud gastrointestinal de las personas mayores, destacando los siguientes:
- Controla el peso adecuado y saludable de nuestros mayores. El AOVE es rico en acido oleico el cual sintetiza en el intestino la sustancia natural conocida como “oleiletanolamida”. Esta sustancia proporciona un efecto saciante a la vez que intensifica la termogénesis necesaria para mantener un peso equilibrado.
- Calma la gastritis y previene tumores en el tracto digestivo. Las potentes propiedades antiinflamatorias del compuesto orgánico denominado oleocantal presente en el AOVE, ayudan a calmar la gastritis y la inflamación intestinal, a la vez que tienen un efecto muy positivo en tumores del tracto digestivo.
- Favorece la absorción de nutrientes (magnesio, zinc y vitaminas) mejorando el control de la glucosa. La ingesta diaria de AOVE favorece la absorción de los nutrientes que estimulan la secreción de la bilis optimizando el trabajo de la vesícula biliar, hígado y páncreas, mejorando el control de la glucosa y disminuyendo el riesgo de diabetes.
AOVE, el mejor aliado del sistema óseo
El aceite de oliva virgen extra es el ingrediente perfecto de la dieta para mejorar y disminuir la inflamación y el dolor de las articulaciones de las personas mayores. Gracias a las propiedades antiinflamatorias del oleocantal, el AOVE es el aliado perfecto para paliar los síntomas de patologías óseas como artrosis y artritis reumatoide. Igualmente, la ingesta de aceite de oliva virgen extra beneficia la absorción de calcio y otros nutrientes que refuerzan el tejido óseo previniendo la osteoporosis en las personas mayores. En consecuencia, poca duda cabe de que este ingrediente es indispensable en el menú de toda la familia.
