Restaurantes en los mercados tradicionales: cómo la alta cocina se cuela en estos espacios de barrio
Hace tan solo unas semanas hablábamos del éxito de los mercados de siempre en la era actual, un formato de compra que convence a sibaritas, hípsters y a clásicos por igual y que fomenta el consumo de producto de proximidad y el mantenimiento de las pequeñas y medianas empresas y autónomos. En ellos abundan las materias primas de gran calidad y de carácter sostenible, que ponen en contacto a diferentes sectores de un mismo barrio. Un concepto que desde Alevoo, siempre hemos querido impulsar. Y es que estos son rincones en los que proliferan los valores de cercanía, confianza y compromiso. En sintonía con estos zocos, convive una nueva y aplaudida oleada de propuestas dedicadas a la alta cocina: son los restaurantes en los mercados tradicionales.
Además de ser los mejores lugares para adquirir frutas, pescado, carne y verdura fresca, en los mercados de abastos ya se puede tomar algo o degustar todo un menú selecto y saludable. Es el concepto de street-market que importamos de escenarios con repercusión y población global como Nueva York y que funciona a la perfección en ciudades y pueblos de todo nuestro territorio. ¿Por qué no degustar esa dorada que se ha adquirido minutos antes en el propio puesto? Es una fórmula que triunfa y que permite cerrar el círculo y consumir el producto en su mejor estado.
Restaurantes en los mercados tradicionales
Representativos de los habitantes de la zona, los mercados siguen resultando atractivos, tanto para locales como para turistas, por contar con una cuidada y selecta oferta y por estar ubicados en edificaciones con mucha historia, que han sabido vencer al paso del tiempo. Con ayuda de la tecnología e impulsados por su belleza natural, los más de 80 mercados de abastos de España son un atractivo más de cada municipio.
En ellos se mezclan los puestos dedicados a la alimentación con los córners gourmet para disfrutar de una comida deliciosa y un buen rato. Si te preguntas dónde puedes disfrutar de estos históricos zocos, son muchos los populares. Entre ellos el Mercado de San Miguel, el madrileño Mercado de San Ildefonso, el Mercado de Maravillos, el Mercado de La Boquería (Barcelona), el Mercado de Abastos de Santiago de Compostela, el malagueño Mercado de Atarazanas, el Mercado de Triana en Sevilla, el Mercado de la Ribera (Bilbao) o el Mercado de Colón (Valencia).
Chefs con sello propio
En los mercados tradicionales triunfan las propuestas y restaurantes de los chefs con sello propio, que han encontrado en puestos pequeños y sibaritas su mejor escaparate. Son reconocidos los nombres de Roberto Martínez Foronda, chef de Tripea en el Mercado de Vallehermoso; Samy Alí, con su Doppelgänger en el madrileño Mercado de Antón Martín; Ali Elkardoudi, en el sevillano Mercado de San Gonzalo; Emilio Gallego, al frente de Silvestre en la plaza de abastos de Tirso de Molina de la capital y el cocinero Sergio Ramos, que abrió su Punto Chef en el Mercado Central de Abastos de Cádiz.
